Creyó que era un sueño pero no.
Estaba dentro de un vaso de agua
Y si no braceaba, se ahogaba
Mas él era un eximio nadador,
y nunca, pero nunca
tenía por costumbre ahogarse
en vasos de agua.
Enfiló hacia la orilla de vidrio y demoraba
-¿será un vaso de whisky?
Por fin estuvo a punto de llegar
Incluso rozó el vidrio
Pero el Gigante tuvo sed
y bebió del vaso.
Hace 5 años
¡A la merda! Tan bien que la venía peleando.
ResponderEliminarNo me gustó el final. Se me ocurren innumerables lecturas y todas basadas en la vida cotidiana. Ahora tengo miedo de que el gigante tenga sed y me trague.
Un abrazo
Especialista en ahogarme en vasos de agua,
ResponderEliminarle tengo más miedo a mi imposibilidad de rozar el vidrio, que al Gigante.
Poesía-pesadilla !!
En el día Mundial de la Poesía, un abrazo inmenso, Poeta Imperfecto.
SIL
y si se bebió el agua donde podrá ahogarse.
ResponderEliminarUn saludo.
Incluso desde la planza del gigante uno puede salir...
ResponderEliminarMe gustó leerte.
con cariño, esencia.
Ay.
ResponderEliminarEsperemos que no sea un gigante orgulloso.
Besotes Marcel.
Sin duda era licor lo que se bebio..y esa lucha constante.
ResponderEliminarVos me sorprendes con tus metaforas me dan mucho para pensar
yo que él me hubiera tomado el agua toda, de a sorbitos largos, así el gigante se hubiese visto obligado a beber en otro vaso y me hubiera dado tiempo para pensar cómo carajo escapo. primera vez por acá, me gustó tu hombre al agua. hasta luego
ResponderEliminarSi hubiese sido licor, se habría ahogado antes de tocar los labios del Gigante.
ResponderEliminarBeso!
¡Qué pena!
ResponderEliminarA puntito de salir...
quizá se pueda nadar
en el estómago
y hay un buen trecho antes
de salir otra vez a la luz
jajaja
un saludo